Núm. 57 (2024): XXX años de la erupción del Popocatépetl, de investigación y acción, de memoria viva, del CUPREDER
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Del volcán al territorio: los caminos del CUPREDER

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Publicado 2024-12-19

Palabras clave

  • geofísica,
  • UNAM,
  • Popocatépetl,
  • Actividad sísmica

Resumen

Hacia finales de 1993, comenzó a regis­trarse un aumento en la actividad sísmica en la región, lo que hizo suponer que el volcán Po­pocatépetl estaba volviendo a la actividad. Cientí­ficos del Instituto de Geofísica de la UNAM lograron convencer a las autoridades de la Secretaría de Gobernación sobre la importancia de atender esta situación, y, tras varias gestiones, la intervención fue autorizada.

Algunos de quienes luego creamos el centro uni­versitario que atendió la emergencia eruptiva, formábamos parte de un grupo que a veces lla­mábamos “Los volcaneros”, nombre que había surgido tras un reportaje emblemático sobre el culto a los volcanes. Además de este cronista y de Alejandro Rivera, formaban la cofradía el antro­pólogo Julio Glockner y el fotógrafo Everardo Rive­ra, quienes habían colaborado en un significativo reportaje previo sobre el Popo, con el título de “Los volcanes y los hombres”, publicado en La Jornada en junio de 1989. En él se documentó por primera vez que los habitantes de las comunidades próxi­mas se referían al volcán como “don Gregorio” y a la volcana como “doña Rosita”, revelando el pro­fundo arraigo cultural y religioso de los pueblos circundantes.

La preocupación por la actividad del volcán llevó a este grupo universitario de la UAP y de la UNAM a la realización de entrevistas y análisis sociales sobre la manera en que se difundía la información sobre la posible erupción y su divulgación en los medios de comunicación disponibles. Una de esas actividades divulgativas fue hacer videograbaciones con el equi­po que había formado Epigmenio Ibarra en Puebla, al que lla­maron Argos del Su­reste. Dos jóvenes egresados de la carrera de Comunicación en la Universidad de las Américas, Gerardo Yanes, el Yuca, y Mel­chor Izunza, fueron los encargados de grabar las entrevistas hechas por el equipo durante los re­corridos que el equipo hizo en torno a los pueblos del volcán, incluyendo declaraciones a los medios electrónicos y charlas de advertencia sobre una erupción inminente.